Vivir con tu propio ritmo natural

El movimiento Slow (Lento) es una filosofía de vida que nos invita a repensar sobre la velocidad en la cual vivimos y a replantearnos como nos relacionamos con el tiempo, para poder identificar cuáles son las falsas necesidades en nuestra vida cotidiana y así lograr un estilo de vida que nos permita vivir más relajados.

El origen:

El movimiento Slow nació a raíz de una manifestación del periodista Carlo Petrini en el año 1989 frente a la apertura de un restaurante de comida rápida o fast food en Italia.

Ese mismo año, en París se dio el nombre al movimiento Slow Food y se diseño su logo, a partir de la imagen de un caracol, símbolo emblemático del movimiento.

El movimiento Slow Food promueve la conciencia de proteger la alimentación autóctona, basada en la biodiversidad y el respeto al medio ambiente.

El objetivo general es acceder a alimentos que sean buenos, limpios y justos.

Buenos alimentos, en el sentido de que sean realmente nutritivos.

Limpios, se refieren a que sean producidos ecológicamente.

Justos, en el sentido de que haya un intercambio equilibrado entre productores y consumidores.

Los beneficios de Slow Food en la salud:

-Favorece una buena digestión.
-Colaboras con el cuidado del medio ambiente.
-Mejor asimilación de los nutrientes que poseen los alimentos.
-Favorece los vínculos sociales.

Tipos de movimientos Slow:

Esta apuesta por una vida más tranquila y armoniosa con el medio ambiente fue adoptada por diferentes grupos y se ha sido implementando en diversos campos.

Esta expansión del movimiento Slow se vió reflejada en diversidad de formas, como por ejemplo en el ámbito laboral podemos encontrar a los denominados trabajos Slow, ya que se ha comprobado que una persona sin estrés rinde mejor.También existe la arquitectura Slow, lugares que buscan vivir tranquilamente con la naturaleza. En la educación Slow, la cual permite respetar los tiempos de aprendizajes necesarios para cada niño y en los denominados pueblos o ciudades Slow.

Por lo tanto, lo que comenzó como un “cuestionamiento gastronómico” en Italia se fue convirtiendo en toda una filosofía de vida.

Los principios generales que promueven en el Movimiento Slow son: